El emperador Carlos V había fundado en
el año 1545 un colegio para educar en la religión cristiana exclusivamente a
los hijos de moriscos del Reino de Valencia, fue familiarmente conocido como
Colegio dels morets. Fue consagrado a
Nuestra Señora de la Misericordia con el nombre de Imperial Colegio de los
Hijos de Moriscos.
Tras la expulsión de los moriscos
en el año 1609, accediendo
a la petición que le había sido efectuada por el clavario mosén Cristóbal
Navarro,
el rey Felipe III, en el año 1620, hizo donación de este antiguo Colegio de
Moriscos, para Colegio y habitación de los niños huérfanos de San Vicente
Ferrer iniciándose en noviembre de 1624 el traslado al nuevo emplazamiento. El
Colegio de Huérfanos heredó el título de Colegio Imperial conservando el escudo
del emperador que decoraba la puerta principal. (VER ENLACE)
Según nos relata el padre Teixidor,
debajo del escudo en el que estaban las armas imperiales se colocó otra lápida
con la siguiente inscripción, que recordaba la donación:
POST EXACTOS
VERO MAU –
RITANOS, ORPHANIS QUI EX S. VIN –
CENTII FERRERI INSTITUTO ALIBI
EDUCABANTUR, FACTA EST DOMUS
HAEC IN REFUGIUM
PHILIPPO III. R.
C. ANNUENTE, ET GREGORIO XV.
P. M. APROBANTE ANNO
REPARATE SALUTIS
M.DC.XXII
DESPUÉS
DE LA EXPULSIÓN DE LOS AUTÉNTICOS MOROS EL REY FELIPE III HIZO DONACIÓN DE ESTA
CASA PARA HABITACIÓN A LOS HUÉRFANOS DEL COLEGIO DE SAN VICENTE FERRER QUE SE
INSTRUÍAN EN OTRO LUGAR.
BAJO
EL MANDATO DEL REY FELIPE III Y EL PAPA GREGORIO XV EN EL AÑO1622.
Posteriormente, sobre la puerta
principal del colegio se colocó el escudo del rey Felipe IV que se conservó en
este lugar hasta que el colegio fue demolido siendo desmontado y trasladado a
la actual sede del colegio en San Antonio de Benageber donde se conserva.
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